miércoles, 22 de noviembre de 2023

Excursión 741: Cerezo de Abajo

FICHA TÉCNICA
Inicio: Cerezo de Abajo
Final: Cerezo de Abajo
Tiempo: 1 a 2 horas
Distancia: 4,4 Km 
Desnivel [+]: 76 m 
Desnivel [--]: 76 m
Tipo: Circular
Dificultad: Baja
Pozas/Agua: No/Sí
Ciclable: En parte
Valoración: 4
Participantes: 30

MAPAS 
* Mapas de localización y 3D de la ruta
















PERFIL
* Perfil, alturas y distancias de la ruta














TRACK

PANORÁMICA 3D GOOGLE EARTH

RUTA EN WIKILOC

RUTA EN RELIVE
Ver esta ruta en Relive

RESUMEN
Con tiempo incierto, por posibles, pero escasas lluvias y con “fresquito” que decimos los bejaranos, iniciamos la mañana del 22 de noviembre ésta corta excursión en lo referente a andar, e intensa en lo gastronómico.

Gracias a lo escaso del kilometraje pude acudir a esta mi primera excursión después de mucho tiempo, aún convaleciente de mi lesión en el tendón de Aquiles derecho. El reencuentro con todos los asistentes fue un placer como no podía ser de otra manera. Os echaba de menos senderomagos.

De entrada mi agradecimiento a los organizadores: Antonio en la ruta, Nicolas en la visita a la cervecería y Marcos Cid en la comida y visita al Palacio del Esquileo.

Desde Cerezo de Abajo, a las 11 h, media hora más tarde de lo que es habitual, iniciamos la ruta 30 participantes, abrigados, con gorros y guantes, la mañana era fría, como ya he dicho con amenaza de lluvia incierta, que al final no se cumplió. 

El camino comenzó en una zona de chalets, creo que a todos nos llamó la atención uno con pintadas curiosas, no exentas de mensajes. Fue en principio un deambular cómodo por carretera asfaltada, el reencuentro lleno de agradables conversaciones con unos y otros, especialmente con mi buen amigo Paco Cantos, poniéndonos al día de nuestras incidencias familiares y de salud.

Dejamos a la izquierda un puentecito sobre el arroyo del Carrascal, más tarde tuvimos que cruzar el arroyo de la Garganta, me sorprendió el área de recreo tan extensa, por la que pasamos con muchas mesas de piedra, de madera, estructuras para juegos infantiles y barbacoas.

Subidita al Alto de la Nava y después camino más llano, sobre una meseta, con buenas vistas sobre toda la zona, los árboles ya con escasa hojarasca, lo avanzado del otoño no perdona la vestimenta de los de hoja caduca. Aguas abundantes en el camino, fuente incluida y Estación de Agua Potable.

Lo que subimos, tuvimos que bajarlo, y como suele ser habitual, se baja peor que se sube, entre robles, matorrales y alguna que otra zarza. Que no se entere nadie....también setas. Después de atravesar los arroyos de Valseco y nuevamente el de la Garganta, emprendimos la vuelta a Cerezo de Abajo, pasando por debajo del viaducto de la A1.

Acabada la ruta, comenzamos la parte “gastronómica y cultural” de la jornada, con dos partes, la primera una visita a la pequeña fábrica artesanal de cervezas “90 VARAS”, con charla sobre la elaboración y los diferentes tipos de cervezas.

Siempre aprende uno cosas nuevas, como por ejemplo que la cerveza negra se hace con cebada torrefacta, por eso ese toque a sabor a café o incluso a chocolate. Tuvimos oportunidad de oler el lúpulo, que como es un cannabinoide, pues eso...huele a “porro”. Degustamos las cervezas, algunos compramos aquellas que más nos gustaron.

Para la segunda parte “cultural-gastronómica” nos dirigimos en coche hacia el Palacio del Esquileo, típica finca de bodas y eventos, donde teníamos concertada la comida. Viene este nombre de los esquileos. En torno a la Cañada de la Vera de la Sierra, longitudinal a la falda norte del Sistema Central, al parecer había en el siglo XVIII más de 40 casas de esquileo,

“Durante mayo y junio, meses en los que tenía lugar el esquileo, cerca de 700.000 cabezas de lanar trashumante eran esquiladas en la provincia de Segovia.

En torno al esquileo, acudían ganaderos, comerciantes, banqueros, contratistas, especialistas en lanas, cortes y paños, en cuyos palacios se alojaban durante el tiempo que duraban las operaciones de lavado, venta y transporte de las lanas.

Los dueños de los rebaños, “solían residir con su familia en la población durante el tiempo que duraba el esquileo, por lo que construían palacios rurales...”

Tras un estupendo aperitivo de bienvenida, nos sentamos a comer, buen menú acompañado de buena charla y agradable sobremesa, que se cerró con una visita a las dependencias del hotel y pudimos admirar, los que aún no los conocíamos los cuadros de nuestro compañero y amigo Marcos Cid.

Una muy agradable jornada, a la que le doy una calificación de 4/5.
Fernando Hernández

No hay comentarios:

Publicar un comentario