miércoles, 19 de agosto de 2015

Excursión 251: Boca del Asno - Cojón de Pacheco

FICHA TÉCNICA
Inicio: Boca del Asno
Final: Boca del Asno
Tiempo: 4 a 5 horas
Distancia:  14 Km
Desnivel [+]: 429 m
Desnivel [--]: 422 m
Tipo: Circular
Dificultad: Media
Pozas y agua: Sí

Ciclable: En parte
Valoración: 5
Participantes: 13

MAPAS
* Mapas de localización y 3D de la ruta

















PERFIL
* Perfil, alturas y distancias de la ruta












TRACK
Track de la ruta (archivo gpx)

PANORÁMICA 3D GOOGLE EARTH
RESUMEN
Para cerrar la temporada de verano, fuimos convocados por Paco N., para buscar el Cojón de Pacheco en los montes de Valsaín.

Además de algunos invitados, como mi amigo Carmelo, allí estábamos lo más selecto del Gmsma, dispuestos a andar, bañarnos y montar en globo. Esto último no lo hicimos, pero si recibimos suficiente información para hacerlo en un futuro próximo.

A la hora acordada estábamos todos en Boca del Asno (llamada así por el aspecto de la estrecha garganta granítica, que recuerda al interior de la boca de ese animal) y comenzamos la ruta, rio arriba, por la margen izquierda (derecha en el sentido de la marcha).

Caminando por las Pesquerías Reales, rodeados de pinos albares, fuimos remontando el río hasta llegar a la confluencia de los arroyos Paular y Telégrafo, allí nos desviamos hasta los Baños de Venus, pero los habituales del baño no pudieron darse el chapuzón correspondiente por la escasez de agua.

A partir de aquí nos desviamos hacia el Este, para cruzar la carretera que baja del Puerto de Navacerrada por el Puente de la Cantina. Después de hacernos las consabidas fotos en la Fuente de la Canaleja, subimos por la Vereda de la Canaleja (que tiene todo el aspecto de las "corredoiras" gallegas), por donde al parecer antiguamente bajaban las maderas.

Antes de terminar la vereda giramos hacia al sur, y comenzamos a subir la Peña de la Cuna o de la Cabra. Para aligerar la subida el segoviano Ángel V. nos fue contando todas las bodas en globo, en las que ha participado (alguna celebrada justo encima de la catedral de Segovia).

Después de parar a tomar un pequeño refrigerio, continuamos la marcha, pero ya sin senda, y a los guías les costó encontrar el famoso cojón, pero naturalmente lo encontramos. Alguna de las chicas (perdón yaya, como ella misma dice),  quiso encaramarse a él, pero no lo consiguió. El cojón es grande (yo creo que superior al tamaño medio), y según cuentan en la Granja, el tal Pacheco existió, estaba bien dotado y al parecer las mozas del lugar estaban satisfechas con él. Un día desapareció y nunca más volvieron a verle, solo quedó como recuerdo su famoso cojón.

Una vez hechas las fotos de rigor, solo restaba bajar de nuevo a las Pesquerías, cruzar el río Eresma por el Puente de Navalacarreta y remontarlo hasta Boca del Asno, tomarse la cervecita de rigor mientras comíamos y por supuesto darse el merecido baño. Fin de ruta y de temporada.

Por último quiero recordaros que el 25 de agosto, día de San Luis, corren las aguas de las fuentes de la Granja. Si podéis, no dejéis de ir.

Buen verano a todos. ¡Nos vemos, en septiembre,  en el Cerro de San Pedro!
Marcos Herrero

miércoles, 12 de agosto de 2015

Excursión 250: Los Chorros de la Pedriza

FICHA TÉCNICA
Inicio: Canto Cochino

Final: Canto Cochino
Tiempo: 5 a 6 horas
Distancia: 12,5 Km 
Desnivel [+]: 532 m 
Desnivel [--]: 532 m 
Tipo: Ida y vuelta
Dificultad: Media
Pozas y agua: Sí

Ciclable: No
Valoración: 4,5
Participantes: 10

MAPAS 
* Mapas de localización y 3D de la ruta
























PERFIL
* Perfil, alturas y distancias de la ruta














TRACK

PANORÁMICA 3D GOOGLE EARTH
* Mapa 3D (archivo kmz)

RUTA EN WIKILOC
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RESUMEN

Otra vez en Canto Cochino nos citamos los pocos que quedamos por éstos lares, 10 senderomagos preparados para emprender una bonita marcha dónde creo que ésta vez sí se ha batido el récord de baños en una jornada.

El único que no se bañó fui yo, el que escribe (Tengo que decir que se me olvidó el bañador, la toalla y la crema). Alguien tenía que captar el momento de las zambullidas de los compañeros, ¿no?. Lucas se bañó por mí.

Empezamos cruzando el puente de madera que baja del bar a la izquierda  para coger el margen izquierdo del rio.

Mañana sin mucho calor en el que ya había gente con el chiringuito montado. Seguimos subiendo y llegamos al primer puente, el de Las Ranas, para continuar ascendiendo hasta el segundo, el Puente de Cola de Caballo. Más adelante y antes de llegar al tercero, el Puente del Vivero, despertamos a unos que pasaron la noche en una roca a 4 metros de altura sobre el  río.

Nos faltaba poco para llegar a la charca más famosa de la Comunidad de Madrid, la Charca Verde. Como siempre el primero que probó el agua fue Paco N. (a Lucas no le cuento), el segundo fue Vicente A, Fernando DH, Ana Chini, Pepa y Rafael. (Lástima no haber podido reflejar las caras en los 5 primeros segundos). En ésta primera charca Pepe A. y Cristina no se animaron, no sé si era por la cara que ponían algunos al entrar en el agua o porque era muy temprano. Yo aproveché para inmortalizar los saltos como unos  perfectos clavadistas  de Acapulco que nos mostraron Paco N. y Vicente A. (ver fotos).

Después del baño continuamos subiendo y pasamos al margen derecho del río, por una pequeña senda que hay paralela a él, hasta llegar a la pista forestal (PR18) que viene de Canto Cochino.

Continuamos por ella hasta alcanzar el mojón que marca el Km 9, justo antes de llegar al Puente del Francés, continuando por una senda que sale a la izquierda, por una escalera de granito.

Esta senda transcurre por la orilla derecha del río y bajo una zona de pinos, donde el desnivel empieza a ser significativo.

Pasamos por una pequeña fuente a nuestra izquierda, de la que apenas salía un hilillo de agua, continuamos subiendo hasta llegar al Puente del Retén, por donde cambiamos de orilla, continuando por el margen izquierdo del río, allí la senda se parece una escalera empinada zigzagueante durante más o menos 1,5 Km.

Seguimos subiendo hasta encontrarnos con tres bolos graníticos enormes, tan enormes que aprovechamos su sombra para esperar a Ana, beber un trago de agua y al mismo tiempo coger aire que la subida empinada de la senda-escalera, nos había quitado.

Seguimos ascendiendo, contemplando el paisaje, impresionante con las 4 torres de Madrid en la lejanía y una parte del embalse de Santillana, ya nos queda poco y llegamos a un claro, despoblado de pinos.

En este punto nos desviamos hacia la izquierda llegando a una plancha de granito que da al vacío y desde dónde se puede contemplar el gran chorro. En esta ocasión, no se veía, sólo podíamos oír un poco el sonido del agua al caer por las cascadas, porque llevaba poco agua.

Merece la pena observar un esqueleto de uno de los pinos autóctonos de la repoblación que se hizo en los años 50 en La Pedriza. Quedan pocos.

Llegado a este punto de la excursión, la hora que era y el calor que llevábamos, sólo se pensaba en buscar una buena poza para darnos un buen baño y comer. Y así fue, descubrimos una poza preciosa, con sol y sombra, agua verde cristalina.

Esta charca se llama Poza de Nerón. Allí se bañó todo el mundo, menos yo. La verdad es que me dieron envidia con esa agua verde cristalina, el sofoco y ver como Paco N. y Vicente seguían deleitándonos con esos saltos acrobáticos (ver fotos).

Ver a Pepa, Cristina, que le costó un poquito, Rafael que le costó menos, ¿Fernando?, venía casi mojado y ¿Ángel?, También se mojó, primero los pies y luego todo el cuerpo.

A los hermanos Anaya, no había quien los sacara. Y Ana, siempre de las primeras. La verdad es que estuvimos muy a gusto. Estábamos solos en la poza. En este entorno tan privilegiado comimos, fue el punto final de la excursión.

La vuelta la hicimos por el mismo sitio hasta llegar otra vez a la charca anterior a la charca verde,  de forma triangular. Hacía calor y ¿adivináis quien se bañó?, pues eso, se bañaron casi todos.

Seguimos la marcha y cruzamos al margen izquierdo del río y curso abajo ¿a que no adivináis lo que nos encontramos?, ¡¡¡¡¡¡ Una novia y un novio vestidos de boda en medio del río!!!! Y el fotógrafo con el agua por el pecho sacando fotos.

Bueno al final llegamos todos bien  y enteros al bar de Canto Cochino para tomar el premio correspondiente, ¿cuál era?, ¿lo adivináis? Pues sí, las cervecitas,  a las que nos invitó  gustosamente Pepa.

Y llegamos a la valoración, ¿ummmmm¿ummmmm??????, Yo le doy 4,5 Sicarias.
J.Manuel Crespo.

P.D.: Desde el año 2016 está prohibido bañarse en toda esta zona.

miércoles, 5 de agosto de 2015

Excursión 249: Arroyo del Aguilón

FICHA TÉCNICA 
Inicio: El Paular
Final: El Paular
Tiempo: 4 a 5 horas
Distancia: 13,5 Km
Desnivel [+]: 230 m
Desnivel [--]: 212 m
Tipo: Ida y vuelta
Dificultad: Baja
Pozas y agua: Sí

Ciclable: En parte
Valoración: 4,5
Participantes: 6

MAPAS 
* Mapas de localización y 3D de la ruta






















PERFIL
* Perfil, alturas y distancias de la ruta













TRACK
Track de la ruta (archivo gpx)

PANORÁMICA 3D GOOGLE EARTH
Mapa 3D (archivo kmz)

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RESUMEN

La marcha de hoy, “un primer miércoles de agosto” y después de la ruta ciclosenderomaga de 51 kms del día anterior, que muchos secundaron, parecía atrevida….pero allí estábamos poco antes de la hora convenida, en el parking del Monasterio del Paular, los seis más Lucas dispuestos a lo que fuese, ¡siempre y cuando hubiera agua por medio!, requisito imprescindible de las convocatorias de la temporada calurosa.

Así que después de los saludos, iniciamos camino atravesando el “Puente del Perdón”, lugar en que la leyenda y la historia se mezclan. 

Continuamos hacia el paraje de “Las Presillas”, que a esa hora mañanera se presentaba atractivo, verde y silencioso (nada que ver con la situación que nos encontraríamos a la vuelta).

Siguiendo agua arriba, enseguida encontramos el punto donde se unen el Aguilón, nuestro rio objetivo del día,  y el Lozoya o (arroyo de la Angostura).

Lo pasamos de largo por una centena de metros siguiendo por la ribera del segundo, para llegar a un puente a cuya sombra se encuentra una buena poza (que se nos quedó pendiente en una excursión anterior la nº 245) y que sería el lugar del primer chapuzón de la mañana.

Cumplido ese primer baño, el de aguas más frías en opinión de algunos, volvemos sobre nuestros pasos e iniciamos el ascenso del Aguilón por su margen derecha siguiendo siempre lo mas cerca posible de la orilla (y despreciando mejores sendas y caminos), pues de eso se trata hoy de explorar el rio sin perderse detalle.

Fresca la sombra de los árboles de ribera, los fresnos, sauces y demás especies, algunas truchas por las charcas y muchos “zapateros” en los remansos…, toda una gozada.

Y así, casi sin darnos cuenta llegamos al puente del camino oficial hacia las Cascadas del Purgatorio, en donde hicimos una parada para un primer tentempié y reponer fuerzas.

Enseguida, tras un km. y medio, llegamos al impresionante paraje de las Cascadas del Purgatorio, en donde nos esperaban los mejores baños del día.

Pero antes, los intrépidos emprendieron la subida a la cascada superior, que no deja de tener su dificultad, al tener que trepar por una pared de piedra que obliga a superar nuestros “vértigos”. Pero el esfuerzo lo merece sobradamente. Sin palabras nos quedamos ante el oculto rincón que se abre a nuestros ojos….el chorro, el agua cristalina, las pozas llamando al baño, hasta encontramos muérdago sobre un soberbio serbal….quién sabe si los viejos druidas de la zona subían hasta allí en su búsqueda en tiempos remotos…

Mientras tanto, hubo tiempo también para realizar un buen reportaje fotográfico a un magnifico ejemplar de mariposa de la especie  Papilio Machaon.

Y después otro baño más en las pozas de la primera cascada, ahora más concurrida. Con tanto baño, el cuerpo ya pedía un buen bocata, de los que dimos buena cuenta a la sombra de los arboles junto al murmullo del agua.

Bajando de vuelta, buscando la margen izquierda para variar, nuevo baño en una poza que advertimos a la subida que es todo un descubrimiento……estrecha …profunda y con ducha ….una gozada más.

Y para finalizar la jornada de baño, en las Presillas, un rápido chapuzón refrescante y cerveza….

Un buen día. Relax en el cuerpo por el disfrute del agua fresca y la mejor compañía. ¿Cuándo volvemos?

Por todo ello, esta excursión bien se merece 4,5 sicarias.
José Ramón Iglesia

sábado, 1 de agosto de 2015

Excursión 248: Nocturna a Cabeza Líjar con luna llena

FICHA TÉCNICA 
Inicio: Alto del León
Final: Alto del León
Tiempo: 4 a 5 horas
Distancia: 10 Km
Desnivel [+]: 366 m
Desnivel [--]: 347 m
Tipo: Circular
Dificultad: Baja
Pozas y agua: No

Ciclable: En parte
Valoración: 5
Participantes: 55

MAPAS 
* Mapas de localización y 3D de la ruta





















PERFIL
* Perfil, alturas y distancias de la ruta













TRACK
Track de la ruta (archivo gpx)

PANORÁMICA 3D GOOGLE EARTH
Mapa 3D (archivo kmz)

RUTA EN WIKILOC
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RESUMEN
No quisieron los astros que pudiésemos ir a Cabeza Líjar con luna llena, porque el viernes tarde se llenó la sierra de Guadarrama de nubes, que descargaron bastante agua en el lado segoviano.

Pero como estábamos empeñado en disfrutar de una excursión nocturna, la hicimos al día siguiente, sábado, con mejor tiempo y luna casi, casi llena. Quedamos para ello en el puerto del Alto del León, donde fuimos llegando senderomagos habituales y amigos invitados, hasta superar el medio centenar.


Tras los saludos y presentaciones de rigor, José María aprovechó para sacar fotos de los participantes por grupos, antes de que la noche nos hiciera irreconocibles.

Iniciamos la marcha ascendiendo por la antigua carretera del puerto a Peguerinos, pasando junto a las antenas de uso militar que coronan el puerto, y antes de abandonar la pista para seguir por la senda del GR-10, hicimos un alto para sacar la foto de grupo.

El ascenso al Cerro Piñonero lo hicimos a buen ritmo, con paradas puntuales para ver el majestuoso paisaje que la altura iba perfilando: la Peña del Oso, la Pinajera, el Montón de Trigo, Siete Picos, la bola del Mundo, La Maliciosa y la Pedriza comandada por el Yelmo, todo un espectáculo.Al otro lado, la llanura castellana y hasta cuatro embalses: Navacerrada, Santillana, La Jarosa y Valmayor, otro espectáculo.

La gran cantidad de fotos que todos queríamos hacer retrasó un poco la marcha, que continuó bajando al Collado de la Gasca, donde cruzamos al lado segoviano para ascender presurosos a Cabeza de Líjar a tiempo de ver la puesta de sol.

El espectáculo fue extraordinario, el sol cada vez más rojizo fue desapareciendo del horizonte agonizando en un cielo ensangrentado y rasgado por amarillentos destellos de oro. Tan sólo el mereció aplauso que dimos al finalizar tan bella exhibición nos sacó de nuestro embelesado estado.

Por aquello de que era sólo casi llena, tuvimos que esperar unos 40 minutos a que saliera la luna, lo que aprovechamos para dar cuenta de los bocadillos y otras viandas que devoramos con placer, viendo cómo tanto por la parte segoviana, como la madrileña proliferaban las luces, que destellaban siguiendo la forma de las autopistas, pueblos y urbanizaciones.

La salida de la luna nos ofreció otro espectáculo que no desdijo al de la puesta de sol, la rojiza esfera fue creciendo en altura y tamaño conforme ascendía en busca de las estrellas.

Esperamos a las once de la noche, para que su luminosidad creciente facilitara el descenso al Collado de la Mina, al que descendimos en una espectacular procesión de luces que zigzagueaba de acuerdo a las curvas del sendero.


En el collado apagamos las linternas y frontales, continuando por la antigua carretera de Peguerinos sin más luz que la proporcionada por la ya blanca luna, que entre los pinares se colaba radiante, facilitando nuestra andadura.

En agradable paseo recorrimos la amplia pista, pasando por el antiguo camino del Vía Crucis, que nos llevó, tras un par de revueltas, de nuevo al Alto del León, dando así por terminada esta memorable noche.

Por todo lo vivido, visto y disfrutado, se concede la máxima nota, 5 sicarias, a esta emotiva excursión.
Paco Nieto