miércoles, 16 de marzo de 2022

Excursión 610: Puerto de Cotos y Poza de Sócrates

FICHA TÉCNICA
Inicio: Puerto de Cotos
Final: Puerto de Cotos
Tiempo: 6 a 7 horas
Distancia: 10,9 Km 
Desnivel [+]: 410 m 
Desnivel [--]: 410 m
Tipo: Circular
Dificultad: Baja
Pozas/Agua: Sí/Sí
Ciclable: No
Valoración: 4
Participantes: 10

MAPAS 
* Mapas de localización y 3D de la ruta













PERFIL
* Perfil, alturas y distancias de la ruta












TRACK

PANORÁMICA 3D GOOGLE EARTH

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RESUMEN
El grupo tenia planeado realizar un viaje a Mallorca. Rosana había preparado unas rutas con encanto por la isla. Pero había que continuar con la tradición de los miércoles, y ¿qué ocurrió? pues que a una novata recién llegada al grupo la nombraron “guía por un día”.

Había que pensar dónde ir, casi imposible no repetir, y además las previsiones del tiempo eran malas, con altas probabilidades de lluvia. Valorando todos los factores planeamos ir al Puerto de Cotos para hacer un recorrido fácil y protegidos por el pinar, siguiendo la bonita ruta RV 9.

Como el aparcamiento del Puerto de Cotos se llena rápido en época invernal, adelantamos la hora de salida a las 9.30. En esta ocasión estaba prácticamente vacío, un “zorro humanizado” se acercó para ver si le damos de comer. Qué dilema darle de comer o seguir que siga sus hábitos naturales, da pena.

Como era previsible en número de participantes era escaso, en total 10. Y como no todo es andar, vamos a dar unas pequeñas nociones del lugar donde nos encontramos.

El Puerto de Cotos (1830metros de altitud) separa los valles de Valsaín, al oeste, y del Lozoya, al este; y el macizo de Peñalara, al norte, y Cuerda Larga, al sur. Como le ha sucedido a otros puertos y pasos históricos de montaña de la sierra del Guadarrama, ha tenido diferentes nombres.

En sus orígenes era conocido como Puerto de El Paular, debido a la existencia a escasos kilómetros del Monasterio del mismo nombre. Carlos III, gran amante de la caza, en 1761 compro el Pinar y las Matas de Valsaín. Desde el siglo XVII los cartujos poseían el Pinar del Paular (hoy Pinar de los Belgas). Para delimitar estas dos zonas el Rey mando colocar unos postes de piedra (hitos o COTOS). En lo alto de puerto y a ambos lados de la carretera, se pueden ver dos de estas señales restauradas.

Antiguamente, el Puerto de El Paular era lugar de paso para pastores segovianos y del Valle del Lozoya, que cruzaban con sus rebaños hacia zonas mas templadas y resguardadas de los vientos del norte. En el siglo XVIII, transitar por esta zona podía se peligroso, ya que era frecuentado por bandoleros y asaltantes de caminos como Manuel Rodríguez "Rey de los Hombres" o Juan Nieva “Cabeza de Vaca”, estos dos últimos en 1799 fueron juzgados y condenados a muerte.

Otro lugar emblemático del Puerto es la Venta Marcelino. Se inauguró en 1924 y hasta los años 50 se encontraba justo enfrente de su ubicación actual. En épocas pasadas dio apoyo a numerosos rescates. Tuvo su auge en los años en que permaneció abierta la estación de sky de Valcotos. La familia lo vendió en 1996. Actualmente hay una webcam y dan diariamente información sobre las condiciones meteorológicas, en nuestro blog hay un enlace a ellas.

Valcotos se abrió en 1969. De los años 1972-1986 experimentó un gran crecimiento. Pero progresivamente comenzó su decadencia; caían menos precipitaciones, los cañones de nieve no eran rentables. Para el funcionamiento de estas maquinas se desvió un arroyo que provoco graves daños en la Laguna Chica de Peñalara, el movimiento ecologista luchó para salvar este humedal.

En 1998 La Consejería del Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid expropio esta estación. En 1999 se inicio el desmantelamiento de las instalaciones quedando solamente en pie el edificio de la Cafetería-Restaurante Zabala, hoy sede del Centro de Visitantes Peñalara. Se reforestaron las pista con pinos y las zonas mas altas con piornos.

Este proceso fue pionero en Europa. Actualmente solo quedan algunas pistas de esquí de fondo en la zona de La Pradera, con una longitud aproximada de 5 km. La catástrofe pudo ser mayor, en el proyecto inicial se incluía la construcción de 1000 pisos en bloques de 20 metros de altura con sus correspondientes infraestructuras y servicios.

En invierno, los fines de semana esta zona de Guadarrama recibe un aluvión de gente, y muchas veces no bien equipada. Los aparcamientos se colapsan. La masificación es un gran problema difícil de gestionar. Además hay escasos servicios de trasporte publico, y para colmo el tren de cercanías sigue cerrado. Lo que esta claro es que hay que protegerla.

Dos días antes de la fecha prevista de nuestra ruta, se había producido una importante “calima” que dejaba una atmosfera muy rara y había teñido de marrón-anaranjado la superficie de la nieve.

Bueno y dicho lo anterior, toca ponerse en marcha. Salimos del Puerto de Cotos en dirección a Valdesquí, a la derecha de la carreta tomamos un camino que se adentra en el pinar de la loma de El Altozano. Alguien se había emocionado y había construido un mini-igloo peculiar, Marcos hizo un intento de meterse pero no le pareció muy habitable.

La nieve estaba un poco dura y decidimos ponernos “los crampones light” (los pinchos). Aproximadamente pasado 1 km el sendero desemboca en la carretera de Valdesquí, la cruzamos y nos dirigimos hacia la pradera donde esta ubicado el Refugio del Pingarron.

El Refugio del Pingarrón fue construido en 1940 por la Centuria de Montañeros sobre una parcela cedida por el ayuntamiento de Rascafria. Se hizo con las aportaciones económicas obtenidas por los montañeros que estaban en el campamento de La Peñota (Hernán Cortes). En 1965 pasó a la O.J.E. Ha recibido diferentes nombre: Centuria Montañera, Diego de Ordas. Actualmente pertenece a la Red de Alberges de la Comunidad de Madrid. No tiene agua ni servicios. Al parecer esta abierto los fines de semana. La ubicación es una preciosidad.

Desde aquí comienza un descenso pedregoso. Desaparece prácticamente la nieve y tenemos que quitarnos los “pinchos”. El camino esta balizado con las siglas RV1 (antes PR-M27), y hasta el arroyo de Guarramillas el descenso es pronunciado.

Hay un puente de madera que cruza dicho arroyo, pero nosotros seguimos por la izquierda para ir a ver la Poza de Sócrates. El nombre es un homenaje a Sócrates Quintana (1892-1984), un asturiano polifacético, jugador del Atlético de Madrid, plusmarquista nacional de salto con pértiga, y miembro del Club alpino Español y delegado de dicho club del Albergue de Cotos. Acondicionó esta poza, levanto un muro para remansar el agua y formar una piscina. Años mas tardes este dique se retiro para conservar mejor el paisaje.

La poza está en un sitio bucólico. Aquí nos entretuvimos un buen rato, foto aquí, foto allá, pues a mi hazme una así, ahora me toca una a mi… y un amable senderista nos hizo la foto de grupo. Retrocedimos hasta el puente anteriormente mencionado, que nos cruza a la otra orilla.

El camino, coincidente con el PR-27, asciende lentamente por un bosque, hasta llegar a una zona mas abierta.

Por sugerencia de José María nos acercamos hasta el mirador natural del Llano Alto sobre el valle de la Angostura y el del Lozoya. Qué idea mas estupenda. La vista es magnífica, aunque la atmosfera está un poco anaranjada, por el polvo en suspensión, y solo nos permite vislumbrar la belleza del lugar.

Se divisa la sucesión de montañas que forman Cuerda Larga. Vemos las inconfundibles antenas de la Bola del Mundo y Valdemartín. Aunque destaca por su verticalidad la cara Norte de Cabezas de Hierro. Son la segunda cumbre más alta de la Sierra del Guadarrama, después de Peñalara (2428 m). Parece que su nombre se debe a la riqueza de este mineral en su loma. Esta formada por dos cumbres con una distancia de 700 metros y un pequeño collado (2,328), la más puntiaguda es la Menor (2.376 m), y La Mayor (2.380 m) tiene una silueta mas redondeada y alargada. Y por debajo de la Mayor sobresalen dos grandes peñascos llamados Pulmones de Cabeza de Hierro Mayor.

En invierno en esta cara norte se forman tubos de hielo que hacen las delicias de los escaladores. En la vertiente noroccidental de Cabezas se encuentra el Circo de Las Cerradillas, donde nace el arroyo del mismo nombre. Desde estas montañas salen dos cordales secundarios; de la mayor lo hace la Loma de Valhondillo que desciende en dirección NE hacia el Valle del Lozoya; y de la menor, la cuerda de El Escalerón Y la Loma de Cabezas que baja en dirección SO hacia la Pedriza.

Si giramos nuestra vista 180 grados nos encontramos con la cumbre más alta de Peñalara (2428m), El Risco Claveles y el inicio de los Montes Carpetanos.

Seguimos bajando y llegamos a una bifurcación señalizada con postes, la derecha va hacia el circo de Cerradillas y Cabezas de Hierro, nosotros seguimos por el de la izquierda que indica Rascafría. Seguimos por una bajada más pronunciada y cruzamos varios puentes de madera sobre el arroyo de las Cerradillas.

Nos adentramos en el Pinar de los Belgas. Este bosque, desde la Reconquista perteneció a La Comunidad y Tierra de Segovia. El 1675 el Rey se lo cedió a los Monjes Cartujos del Paular. Con la desamortización en 1837 fue adquirido por la Sociedad Anónima de los Belgas.

Alberga una de las mejores representaciones de pino silvestre en la península ibérica. Sigue siendo un ejemplo en materia de gestión forestal. Fueron pioneros en la conservación de los buitres negros de la sierra del Guadarrama. En diciembre del 2021 Parques Nacionales lo adquirió  por 19 millones de euros con el fin de protegerlo y evitar su explotación comercial.

Ha sido un invierno muy seco, con muy poca nieve, la vegetación es escasa. Habitualmente en primavera el pinar se tapiza con el verde de los helechos y musgos.

Seguimos bajando, como la senda es más amplia nos permite ir charlando más fácilmente. Buena conversación con buenos amigos.

Llegamos al puente sobre el arroyo de la Angostura, aguas abajo se irán uniendo a otros arroyos como el del Aguilón, y formarán el rio Lozoya a la altura del Paular. Y aquí nos hicimos otra foto del grupo.

Era la hora del tentempié o la hora del Ángelus, como creo que la bautizo Jorge Montero. Ya una vez “matado el gusanillo” reiniciamos la andadura. Primero con una pequeña bajada, y luego la subida hasta cruzar la carretera M-604. Y aquí tomamos un sendero más estrecho que asciende por un pinar, que de vez en cuando nos permite volver a contemplar a nuestras amigas Las Cabezas de Hierro.

Llegamos al arroyo del Toril, donde otro puente de madera nos permite cruzarlo. Vamos subiendo hasta La Pradera.

Una zona mucho mas abierta. Y por donde podemos observar la señalización con vallas de madera de las pistas de esquí de fondo y los restos de una construcción de antiguos campamentos. Atravesamos esta zona y el camino ya nos lleva hasta el aparcamiento de Cotos.

Nos dirigimos hacia la cantina de la estación del tren, pero estaba cerrada. Otra vez para arriba y entramos en Venta Marcelino.

Allí Jorge nos invitó a unas cervezas o caldos para celebrar la reciente boda de su hija. Nos dejaron comer nuestros bocatas, pero con disimulo ya que no esta permitido.

Le doy las gracias a mis compañeros por sus amables y cariñosas palabras. El GMSMA ha realizado varias excursiones por estos lugares, las crónicas han sido muy buenas, he intentado dar otra visión de la zona.

La califico con un 4, la calima no nos ha dejado disfrutar plenamente de la belleza del paisaje. Y colorín colorado, o más bien anaranjado, esta ruta ha terminado.
Flor Valverde

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